Se cumplen 17 días de protesta contra la minería en Socha, Boyacá

La comunidad de la vereda El Mortiño, sector El Alizal completa 17 días de una manifestación pacífica por la reapertura de Carbones El Alizal, antes Carbones Andinos
La comunidad de la vereda El Mortiño, sector El Alizal completa más de 2 semanas de una manifestación pacífica por la reapertura de Carbones El Alizal, antes Carbones Andinos, asegurando que buscan proteger los recursos hídricos.
Los habitantes de la vereda El Mortiño, en el municipio de Socha, Boyacá, enfrentan graves problemáticas debido a la minería de carbón, agravadas por una decisión judicial que podría reactivar las operaciones de la empresa Carbones El Alizal, antes conocido como Carbones Andinos. La razón principal que exponen los habitantes de esta zona rural de la capital de la provincia de Valderrama, es que dicha actividad afecta el páramo de Pisba, alterando su capacidad de captación y almacenamiento de agua, contaminando fuentes hídricas y generando impactos negativos en la agricultura, comentando además que la mina está muy cerca del páramo y que de allí sale el agua para la vereda El Mortiño, casco urbano y otros puntos del municipio, lo que genera una enorme preocupación entre los habitantes.
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Por otro lado, dentro de los estudios y razones que tiene la comunidad es que la minería provoca contaminación auditiva y paisajística, afecta la calidad de vida de los habitantes y genera riesgos como deslizamientos y daños en viviendas.
Unión
Ante la problemática, la movilización social ha sido clave en la defensa del territorio, exigiendo justicia ambiental y alternativas sostenibles. El caso de Socha evidencia la necesidad de repensar el modelo extractivista en Colombia, priorizando la protección ambiental y el bienestar comunitario, tanto así que la comunidad de El Alizal se unió, haciendo turnos rotativos, bloqueando la entrada de la mina, como una manera de protesta, esperando ser escuchados para que se reevalúe la licencia ambiental dada a la empresa.
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Por ahora la comunidad sigue unida, haciendo un llamado a las entidades competentes para que los escuchen y brinden prontas soluciones que respeten el medio ambiente, especialmente los recursos hídricos.
En diálogos con Matinal Noticias, la lideresa Lina Arismendy expresó que están adelantando medidas legales en contra del fallo, recalcando que ya se han reunido con las autoridades de carácter ambiental, Personería, Corpoboyacá, Agencia Nacional de Minería, Defensoría del Pueblo y delegados de la Administración Municipal, pero no han logrado hacer nada, por lo que el conflicto social y ambiental que se vive por estos días en esta zona de Socha divide y preocupa a la comunidad, teniendo en cuenta también que es uno de los municipios carboneros del departamento boyacense.
Por ahora la comunidad de El Alizal está dispuesta a seguir con la manifestación pacífica de manera indefinida hasta ser escuchados y obtengan soluciones que contribuyan al medio ambiente.